Los Planes de Movilidad Urbana
Un Plan de Movilidad Urbana es esencialmente un plan director que analiza y organiza la forma de moverse por los diferentes medios de transporte. Estos incluyen caminar, andar en bicicleta, autobús, tren, taxi, moto, coche, furgoneta y camiones (HGV – Heavy Goods Vehicle). Para desarrollar un plan eficaz, es esencial que el público y las partes interesadas participen en su desarrollo para garantizar que el resultado final sea lo más eficiente y operativo posible.
Todo plan de movilidad persigue los siguientes objetivos:
- El sistema de transporte debe ser accesible para todos.
- Mejorar la seguridad del tráfico y de los usuarios de transporte público.
- La reducción de la contaminación atmosférica, el ruido, las emisiones de gases de efecto invernadero y el consumo de energía.
- Mejorar la eficiencia y rentabilidad del transporte de personas y mercancías.
- Mejorar el atractivo y la calidad del medio ambiente urbano.
Dependiendo del tipo de plan a considerar, la organización, agentes involucrados, desarrollo de las mismas medidas a aplicar, etc. serán distintos. Se pueden distinguir dos PMUS (Planes de Movilidad Urbana Sostenible) o PTT (Planes de Transporte al Trabajo).
Planes de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS)
Los PMUS son un conjunto de actuaciones dirigidas a fomentar modos de desplazamiento más sostenibles (caminar, bicicleta, uso del transporte público, etc.) dentro de una ciudad; es decir, compatibles la movilidad, la cohesión social y la defensa del medio ambiente, garantizando así una mejor calidad de vida para los ciudadanos.
Cuando una ciudad de expande y aumenta el número de vehículos implica un cambio en el desarrollo de los flujos de tráfico y de las necesidades de los usuarios. Al expandirse las ciudades, las zonas residenciales quedan muy alejadas del centro neurálgico empresarial de la urbe, por lo que se esclaviza a sus residentes a utilizar el transporte privado si no se prevén medidas de transporte alternativas. Éstas y otras circunstancias hacen cada vez más largos los trayectos e incrementan la dependencia del coche privado, disminuyen la seguridad vial y aumentan la polución, el gasto energético y el ruido, su minimización es el objetivo de los PMUS.
Los PMUS deben contemplar varias iniciativas para optimizar los recursos existentes y crear los que fueren necesarios de forma sostenible:
- El desarrollo de los carriles y redes de préstamo de bicicletas.
- La regulación de las zonas de estacionamiento y aparcamientos disuasorios.
- La creación de carriles bus y vías para vehículos de alta ocupación.
- La puesta en marcha de los autobuses de empresa o la promoción de la propulsión eléctrica en el transporte público.
Como ejemplo de últimas iniciativas en movilidad, podemos citar las Paradas Solares Inteligentes en Barcelona, un sistema innovador y sostenible de paneles de información al usuario, que funcionan sólo con energía solar. En Madrid, los usuarios pueden obtener información en las paradas del tiempo de espera, combinaciones con otros medios de transporte, información por bluetooth, etc.
Marquesina interactiva dotada de paneles solares (Barcelona). Fuente: Barcelona Smart City
Estos planes se recomiendan para ciudades a partir de los 50.000 habitantes y deben ser coordinados con la planificación urbanística y la gestión medioambiental.
Planes de Transporte al Trabajo (PTT)
En el caso de la gestión de la movilidad a los centros de trabajo, a diferencia de lo que ocurre en los planes de Movilidad Urbana sostenible (PMUS) a desarrollar a nivel municipal y supramunicipal, se dan una serie de características comunes que favorecen la implementación de diversas medidas y lo hacen idóneo para la aplicación de los planes de movilidad. Éstas son:
- Horarios de entrada y salida similares para el conjunto de los empleados.
- Destino idéntico o compatible.
- Oferta de transporte público conocida.
- Conocimiento de rutas con posibilidad de uso de coche compartido.
Estos planes de movilidad dependerán asimismo de diversas variables entre las que se encuentran:
- Disponibilidad y facilidad de acceso a transporte público.
- Ubicación.
- Facilidad de acceso a vehículo privado.
Dependiendo de estos factores, y según la clasificación realizada en la guía práctica PTT del IDEA, los centros de trabajo se pueden clasificar en tres tipos principales:
- Centros de trabajo en núcleos urbanos, con buena comunicación en transporte público y generalmente con escasez de plazas de aparcamiento.
- Centros de trabajo en polígonos industriales o parques tecnológicos, con posible escasez de transporte público y sin excesivos problemas de aparcamiento dependiendo del caso.
- Centros en la periferia, con posible poca oferta de transporte público y sin problemas de aparcamiento generalmente.
Ventajas de la aplicación de planes de movilidad.
En la actualidad todavía no tenemos en España una legislación que regule la movilidad urbana en su conjunto. La regulación existente recoge un conjunto de normativa en la que se trata de forma independiente los diferentes aspectos vinculados al transporte. Sólo en el ámbito autonómico, como más adelante se verá, existe alguna iniciativa.
Se trata, en general, de normativas referidas a aspectos técnicos de los vehículos, medioambientales, de seguridad vial y de ordenación del tráfico y del transporte terrestre.
Existe un reparto de las competencias en materia de transporte entre los diferentes niveles: estatal, autonómico y local. Hoy en día son los propios municipios quienes, en consonancia con la legislación estatal y autonómica correspondiente, tienen las competencias en materia de ordenación del tráfico, planificación urbanística, prestación del servicio de transporte público y protección.
Sin embargo, sea cual sea su nivel de aplicación, todos tiene una serie de ventajas comunes que vamos a detallar a continuación:
- Contribuyen a disminuir los niveles de gases contaminantes y la contaminación acústica.
- Fomentan un modelo de desplazamiento seguro y eficiente lo que repercute en la disminución del número de accidentes y de las consecuencias de estos.
- Estimulan el uso del transporte público y los desplazamientos a pie o en bicicleta.
- Animan a hacer un uso más racional y eficiente del vehículo privado.
- Ayudan a ahorrar (gastos compartidos) a quienes necesitan usar el coche en sus desplazamientos.
- Contribuyen a impulsar la instalación de nuevas tecnologías y a la implantación de nuevos sistemas de eficiencia energética.
- Mejoran la salud pública.
- Reducen la presión del tráfico rodado sobre la ciudad con lo que se recuperan los espacios públicos como lugares de convivencia.
Autor: Víctor Bouzas
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