Parque Nacional das Illas Atlánticas: Isla de Sálvora

La isla de Sálvora es evocadora de naufragios y de leyendas. En la actualidad pertenece a la parroquia de Aguiño (Ribeira) y es la gran desconocida de las Islas que forman parte del Parque Nacional Marítimo-Terrestre de las Islas Atlánticas porque no llega en todo el año ningún servicio regular de transporte de pasajeros, aunque sí hay empresas que realizan visitas guiadas. El único lugar donde está permitido fondear y desembarcar –previo permiso del Parque– es la Praia do Castelo o Praia do Almacén, donde se levantan la estatua de la Sirena dos Mariño. El faro de Sálvora, los restos de la antigua factoría de salazón, un pequeño castillo propiedad del marqués de Revilla y un monumento a la mujer son sus únicos referentes culturales.

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Carreiro de Sagres (Sálvora). Autor: Miguel Angel Pino Landín

 

Historia

En el 1120 la isla fue invadida por naves sarracenas que se refugiaron en ella esperando refuerzos cuando se disponían a invadir estas tierras. Pero la tardanza de aquella ayuda, hizo que los navíos cristianos enviados por orden del arzobispo de Santiago se apoderasen de las naves invasoras, frenando por largo tiempo estas incursiones. A partir de entonces, esta isla desconocida comienza a ser ambicionada por la nobleza. El desinterés del Cabildo Compostelano por Sálvora, hizo que a partir de esa época, los vecinos de Carreira fueran ocupando la isla para utilizarla como terrenos de cultivo, llegando a establecerse en ella años más tarde.

El señorío de la isla le correspondía a los Fandiño y los Mariño, que ordenaron la población de la isla hasta que pasaron la propiedad al marquesado de Revilla. En el año 1770, el comerciante coruñés D. Jerónimo de Hijosa instaló por poder una fábrica de secado y salazón de pescado, a la que en 1960 se le añadieron dos torres y almenas, y hoy es conocida como O Almacén, siendo la primera factoría de salazón de Galicia.

A principios del siglo XIX, las dificultades económicas hacen que los habitantes de Carreira se desplacen a la isla para trabajar como caseros de explotaciones agrícolas y ganaderas. Se consolida una pequeña aldea con ocho casas en torno a una plaza y dos fuentes de agua potable. La población era de 60 personas y se les conocía por el nombre de la casa que habitaban.

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Ría de Arousa desde la isla de Sálvora. Fuente: Turgalicia

Sálvora y el Ayuntamiento de Ribeira fueron honrados como «muy humanitarios«, y especialmente tres mujeres fueron condecoradas como Heroinas de Sálvora, por el auxilio a los náufragos del vapor-correo «Santa Isabel», logrando salvar la vida de 53 personas y que dejaría tras de sí un rastro de 213 muertos. La hazaña les valió varias medallas al mérito así como el reconocimiento de Muy noble, muy leal y muy hospitalaria a la villa de Ribeira, concedido por el rey Alfonso XII. Frente al faro, se puede ver la piedra de Lapegar, causante del naufragio aquella noche de temporal del 2 de enero del año 1921. Vivían entonces en la aldea 59 personas, y la mitad de ellas estaba en los pueblos de la costa celebrando las fiestas navideñas cuando ocurrió el suceso. Aquel mismo año se inauguró el actual faro. Puedes saber más de esta historia en el enlace: http://salgueiras.blogspot.com.es/2011/04/las-heroinas-de-salvora.html

En 1958 la familia Otero-Goyanes recuperó la propiedad de la isla, junto con los islotes de Vionta y Noro siendo el precio de compra al Estado Español de 1.293.758 pesetas de la época. Hasta el año 1960, los vecinos de Carreira llevaban en barcas el ganado para pastar en los prados. El último habitante abandonó la aldea en 1972.

En marzo de 2007 la isla fue adquirida por Caixa Galicia por 8,5 millones de euros y a finales de ese mismo año el Ministerio de Medio Ambiente ejerció su derecho de tanteo, comprando Sálvora, Vionta y Noro por esa misma cantidad. La Xunta de Galicia, que figura como titular del paraje desde el 1 de julio de 2008, conjuntamente con el Ministerio de Medio Ambiente han iniciado los trabajos para rehabilitar el enclave.

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Leyendas

En el frontal de la Isla se puede ver la estatua de una sirena: la sirena de Sálvora. Se llama Mariña y es la madre de los primeros propietarios de la isla, los Mariño. La escultura data de 1968 y es obra del escultor burgalés Ismael Ortega Martín, que la realizó por encargo de Joaquín Otero-Goyanes, marqués de Revilla, heredero descendiente de los primeros propietarios de la isla. La leyenda de la sirena de Sálvora explica el origen de esta familia quienes en la segunda mitad del siglo XX convirtieron la antigua fábrica de salazón en un pazo y la taberna del pueblo en capilla anexa.

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Sirena de Sálvora

Cuenta la leyenda que la sirena Mariña fue encontrada en la playa por el caballero don Froilaz, que enseguida descubrió que era muda, la hizo su esposa y fruto de aquella relación nació Mariño. Preocupado por la mudez de su mujer, don Froilaz confió su pesar al abad, y éste le aconsejó que le provocara una fuerte emoción que pudiera devolverle el habla. El noble encendió entonces una hoguera y en un momento en el que Mariña se acercó con su hijo en brazos se lo arrebató y simuló echarlo al fuego, lo que causó la reacción esperada, y Mariña pronunció su primer sonido.

Fuente: www.galizeando.com

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Víctor Bouzas Blanco

Licenciado en geografía y Postgrado en Tecnologías Digitales de Documentación Geométrica del CSIC. Especialista en diseño cartográfico y análisis geoespacial.

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